Mitos: La Mayu Maman, la umita.
Leyendas: crespín, almamula.
El Umita fue un Niño que vivía en una tribu indígena con su
familia. Estos fueron atacados por malones que degollaron a todos los que
vivían allí. Uno de estos era ese niño. Su cabeza rodó por el suelo y la madre
tierra le dio rices al cuello y lo dejo vivir. Para que el pueda ver las caras
de los asesinos. El miro todo lo que hacían estos. Y por la noche salió rodando
en busca de estos, mientras se lamentaba de lo sucedido.
Los siguió y cuando dormían fue ahorcándolos con su largo cabello y asfixiándolos introduciendo sus cabellos entre la boca. Uno a uno, noche a noche. Hasta terminar con ellos.
De allí se dice que esta cabecita vaga rodando por los lugares y protegiendo a quienes les acecha el peligro. Asustando con sus lamentos o matando con sus cabellos.
Los siguió y cuando dormían fue ahorcándolos con su largo cabello y asfixiándolos introduciendo sus cabellos entre la boca. Uno a uno, noche a noche. Hasta terminar con ellos.
De allí se dice que esta cabecita vaga rodando por los lugares y protegiendo a quienes les acecha el peligro. Asustando con sus lamentos o matando con sus cabellos.
Se lo describe como una cabeza humana de larga y enmarañada
cabellera que vaga sola en la noche, rodando por el suelo o volando a ras de
él, y produciendo al desplazarse un ruido suave, como de trigal mecido por el
viento. También como una gran cabeza de dura pelambre, o una cabecita como de
criatura. Suele aparecerse en las taperas o en los caminos viejos y abandonados
en ese momento en que vacila, a punto de extinguirse, la luz del día, llorando
y con el rostro bañado en lágrimas. Aunque por lo común reduce su llanto a una
simple expresión de amargura, hay veces en que implora piedad, o pide ayuda
para salir de una situación angustiante. Quiere siempre contar al viajero su
aflicción, pero sólo logra aterrorizarlo con su presencia.
Hay
versiones terribles de esta leyenda que hablan de viajeros que se trabaron en
feroz lucha con ella hasta el amanecer, hora en que la vieron transformarse en
toro o ternero, y confesar bajo tal apariencia el error o la falta que está
condenada a purgar. Pero el vencedor no salió en ese caso bien librado, pues
perdió el habla. O sea, la palabra de la Umita sólo sonaría para privar de la
suya al desventurado receptor.
Sin embargo,
muchos de los que la conocen no le temen. Hasta afirman que hacerse acompañar
por ella en una travesía nocturna es una protección eficaz contra los malos
espíritus, aunque hay que aguantar, claro está, sus constantes quejas.
Mayu Maman: http://www.portaldesalta.gov.ar/mayup.html
Almamula: Según dice la
leyenda este ser era una mujer sin moral, que cometió incesto con
su hermano y su padre, y hasta tuvo relaciones sexuales con el cura del pueblo... Ver mas...
Realmente me parese una pagina buena , donde te podes informar y saber de las leyendas de Sgo del estero Muy lindo BLOG !
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